El recaudador

“Diseñar, en forma urgente, un plan de emergencia para el municipio y, a su vez, hacer nexo con el gobierno provincial y nacional”, fueron las razones por las que José Carlos Halle convocó a Eduardo “Lalo” Macri para ocupar la Secretaría de Coordinación Económica.
Si bien nos preocupa la política económica impuesta por Macri, basada en recaudar a cualquier precio, mantener la emergencia económica y hacer caja para tener sueldos al día, sacrificando los servicios, es otra cuestión la que nos quita el sueño y nos permite afirmar que en esta ciudad es más fácil reciclar funcionarios que residuos urbanos.
Si uno llega a la función pública en base a su trayectoria personal y profesional, podemos decir que Lalo Macri tiene más que ganado su lugar. Ha quedado demostrado en la historia de la provincia (no así de la justicia entrerriana, que suele estar de espaldas al pueblo) la habilidad del “recaudador” a la hora de manejar fondos.
El ahora Secretario de Coordinación Económica, quien acompaño a Jorge Busti en dos de sus gestiones, debió alejarse de su cargo provincial a fines 1997, tras haber quedado ligado a diferentes hechos de corrupción que derivaron en una causa por enriquecimiento ilícito.
En dicha causa, que termino archivada por la justicia entrerriana, Macri quedaba implicado con la existencia de tres cuentas en Suiza, a nombres de sociedades fantasmas con sede en Uruguay.
Las investigaciones comprobaron que la recaudación personal del “Lalo” alcanzaría los 1,7 millones de dólares divididos en 3 cuentas nombres de las empresas: Wini (nº de cuenta 0065-888216-232), Ramgate S.A. (nº de cuenta 0065-636384-32) y Notki (nº de cuenta 0065-116707-82).
En todas las operaciones participó como apoderado o asesor legal y contable el Dr. Borrajo, ex funcionario bustista, quien reconoce ser apoderado de las 3 firmas).
Uno de los mejores amigos de Borrajo, Alfredo Elgue, ex funcionario del Banco Velox, al llevarse su cartera de clientes al Bank Leu de Zurich, fue quien paso las cuentas de Macri a Suiza.
Todas las empresas aparecen legalizadas en el Consulado Argentino de Montevideo y figuran en el Registro Nacional de Comercio de Uruguay.

¿Como trabajo la justicia?

Hubo muchas medidas instrumentadas, pero todas fracasaron. Por ejemplo:

Mónica Corbalán, ex esposa de Lalo Macri, reconoció que tenía “mucho para contar” pero opto por no avanzar en sus dichos porque estaba “presionada y amenazada”.

Gustavo Borrajo también fue a declarar. Se reconoció como apoderado de Macri, pero negó haber manejado cuentas en el exterior. Sostuvo que la firma que aparece estampada era “parecida” a la suya, pero la desconoció.

A Néstor Grifoni, mano derecha de Macri, a pesar de aparecer en la AFIP cumpliendo funciones en la empresa Inenco de Santa Fe (propiedad de Macri), se le hicieron unas 10 veces, pero jamás se lo encontró.

Alfredo Elgue, ejecutivo de cuentas de Macri y amigo personal de Borrajo, nunca fue citado.

En los exhortos que se hicieron al Registro Nacional de Comercio de Montevideo, que demando unos 6 meses, se pregunto si Macri y su esposa figuraban en sociedades uruguayas y al existir una respuesta negativa no se avanzo más. (Ninguno de los dos figuraba en las empresas off shore, lo hacían a través de otras personas, si se hubiera preguntado por Grifoni o Borrajo, se hubiera avanzado en la causa).

Cabe aclarar que el Registro Nacional de Comercio reconoció la existencia de las sociedades mencionadas por donde pasó el dinero con destino a Suiza.

Esto es una breve síntesis de la información levantada de diferentes medios locales. Para muestra basta un botón, dicen, y queda más que claro que Lalo Macri supo hacer los contactos necesarios para que la justicia no tenga las ganas necesarias de encontrar lo obvio.
Queda también demostrada la eficacia del recaudador, que suponemos fue la principal razón por la cual hoy ocupa su cargo en el municipio. Confiamos en su habilidad y creemos, desde este humilde blog, que poniendo la mitad de la energía que utiliza para mejorar sus ingresos personales, Paraná todavía tiene una salida.